La marca celebra medio milenio de historia con un café de origen único, destacando el trabajo de los caficultores del Caribe colombiano.
Juan Valdez presentó una edición especial de café para conmemorar los 500 años de fundación de Santa Marta. El lanzamiento incluye granos procedentes de la región del Magdalena, una zona cafetera que combina la influencia del mar y la montaña para ofrecer un perfil de sabor auténtico y distintivo.
El empaque de esta versión limitada rinde homenaje a la ciudad más antigua de Colombia. Su diseño incorpora símbolos arquitectónicos y paisajes emblemáticos de Santa Marta, evocando su legado cultural e histórico. Además, la presentación busca conectar emocionalmente con los consumidores que valoran la tradición cafetera y su vínculo territorial.


Perfil sensorial y compromiso con caficultores
Esta edición especial se caracteriza por un equilibrio entre acidez media-alta, cuerpo medio y delicadas notas aromáticas que evocan avellana, naranja y té de azahar, lo cual resulta en una experiencia en taza suave, cítrica y llena de carácter. El uso exclusivo de granos del Magdalena es un reconocimiento al esfuerzo y conocimiento de los productores locales.
En palabras de Camila Escobar, CEO de Juan Valdez, este lanzamiento “celebra sus 500 años con lo mejor que sabemos hacer: un café premium 100 % colombiano, cultivado por manos que honran esta tierra”. La iniciativa refleja un enfoque de retail consciente, al poner en el centro a quienes trabajan directamente en el campo.
Con una producción limitada de 2 100 unidades, esta variedad estará disponible en las tiendas Juan Valdez de Colombia desde el 20 de julio hasta el 31 de agosto, o hasta agotar existencias, lo que aporta exclusividad al producto y motiva su rápida rotación.
Estrategia de marca y vínculo cultural
La edición especial conmemorativa fortalece la estrategia de Juan Valdez de vincular su producto con hitos patrimoniales y territoriales. Al enfocarse en Santa Marta, la marca fortalece su propuesta de valor basada en origen certificado, autenticidad y experiencia cultural.
Esta práctica fortalece la imagen de Juan Valdez como embajador del café colombiano, aportando significado a cada lanzamiento y construyendo una narrativa que trasciende el producto. Además, el enfoque limitado genera urgencia entre consumidores y coleccionistas, contribuyendo también a la visibilidad y posicionamiento de la línea premium.