Restalia pone en marcha la reedición de una de sus marcas más reconocidas, La Sureña. Este proyecto arranca en el mismo local del centro comercial La Vaguada de Madrid donde La Sureña comenzó su andadura y se completará a lo largo de los primeros meses de 2026.
La renovación de La Sureña, que lleva quince años en el mercado de la restauración organizada, incluirá tanto aspectos estéticos como una nueva oferta de productos y formatos de venta. María Noguera, directora de Relaciones Institucionales y Comunicación de Restalia, explica: «Todas las marcas del mundo, y más cuando llegan a unos ciertos niveles de madurez en el mercado, necesitan de una revisión continuada y la adaptación a sus ciclos naturales de vida, y en Restalia somos conscientes de este reto permanente para mantener frescas y atractivas nuestras ofertas de producto».
La estrategia de Restalia para esta reedición se centra en la oportunidad de la comida mediterránea en el segmento de las grandes cadenas de restauración organizada en España, actualmente dominado por la comida internacional. El objetivo es «volver a los orígenes y reivindicar los hábitos de consumo más auténticos de nuestra cultura, poniendo el foco en la gastronomía mediterránea, catalogándola en un segmento que la compañía ha definido como ‘casual ibérico'».
La recién estrenada Sureña servirá de modelo para la remodelación del resto de restaurantes de la cadena y futuras aperturas. Esta reedición no solo rescata la esencia de sus orígenes con una oferta de productos de comida tradicional española, sino que también introduce un nuevo formato de presentación adaptados a criterios de sostenibilidad y eficiencia.
Entre las novedades gastronómicas, destaca una nueva carta que refuerza el concepto ‘casual ibérico’. Se incorporan nuevas referencias en formato ‘Papelones’, como croquetas de jamón, tortillitas de camarón, buñuelos de bacalao o guindillas en tempura, así como frituras clásicas andaluzas. También se suman los ‘Planchaditos‘, pequeños bocados de pan tostado con rellenos variados, y el ‘Menú Gamberro‘, que incluye una hamburguesa de gambón, patatas y bebida. La carta se completa con aperitivos como gildas, aceitunas o altramuces.

En cuanto a las bebidas, La Sureña mantiene su apuesta por el consumo de cervezas heladas en vidrio, en el popular botellín de quinto. Como novedad, se servirán en un nuevo envase -cajonazo- de nueve botellines denominado técnicamente Cold BrIX, que mantiene el producto a su temperatura óptima gracias a la tecnología de enfriamiento a través de neveras de alta eficiencia de temperatura negativa controlada. Esta tecnología ha sido desarrollada por KUBO, el centro de innovación creado por José María Capitán.
Estéticamente, La Sureña recupera sus raíces con una escenografía de bar tradicional español, colorida y luminosa, que busca transmitir «sencillez y compromiso con la identidad de nuestra cultura popular». El diseño busca reflejar la esencia del estilo de vida andaluz, reforzando la conexión emocional de la marca con su lugar de nacimiento.
Restalia también refuerza su compromiso con la formación de los equipos. Cada vez que la compañía lanza un nuevo concepto o incorpora productos, se implementa un plan de formación integral para todos los profesionales de la red, un programa que forma parte del ADN de Restalia desde sus inicios.
La Sureña fue lanzada en 2010 por Restalia, fundada por José María Capitán, como su segunda creación en el mercado de la restauración organizada. La marca se caracterizó por su sencillez, efectividad, cercanía y precios asequibles. Quince años después de su nacimiento, la marca se renueva para ofrecer nuevas propuestas que transmitan la esencia del sur de España a través de sus sabores.